Hace un tiempo, mientras me sacaba la pelusa del ombligo, llegué a la siguiente conclusión. Nadie nos prepara para chocar con la terrible realidad...nada es para siempre. En base a la inocencia y a el estimulo de los afectos creemos que nuestras amistades nos acompañarán en todas. ¿Dónde quedaron aquellos que aperraban sin importar que tan barato o caro fuera el copete? ellos se fueron, se los llevaron los egos, el individualismo, las metas personales...en fin ahora sólo me conformo con encontrar entre esos 618 amigos de Facebook a alguno de verdad que le importe realmente como está mi familia, o que estoy haciendo. Hago mi propio mea culpa soy parte de aquellos que los dejo partir por perseguir mis propios sueños sin embargo soy de aquellos nostálgicos que no se conforman con un toque en Face. ¿serán acaso los amigos circunstanciales entonces?. Sea cual sea la conclusión, prefiero creer que los amigos que ya no estan en algún momento de su día, se acuerdan como yo me acuerdo de ellos.
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